Debemos reconocer que el título realmente no es del todo correcto, ya que los currículums audiovisuales, en el fondo, nunca han desaparecido. Sin embargo, como suele ocurrir, en las últimas semanas se han vuelto virales gracias a la experiencia de un usuario que recurrió a este modelo para obtener empleo.
Y es que, de manera recurrente, cada cierto tiempo los medios generalistas recogen noticias relacionadas con tipos de currículum no convencionales para un perfil medio de trabajador. Pensemos que, en este caso, un currículum audiovisual e imprescindible por ejemplo para un artista, pero no parece muy adecuado para alguien que va a desempeñar otro tipo de tareas profesionales.
Qué son los curriculum audiovisuales
Su propio nombre los define. Se trata de currículums en formato audiovisual, imagen y sonido, y en los que el candidato suele desplegar todas las herramientas habituales en un currículum tradicional, pero en un formato adaptado al medio.
Realmente, no existe un guion claro de currículum audiovisual. De hecho, en la mayoría de ocasiones en los que este modelo ha saltado a la prensa tenían más que ver con entornos laborales muy concretos, por ejemplo, el marketing o la comunicación. Por tanto, una de las características fundamentales de este modelo curricular es aplicar creatividad.
En un currículum audiovisual hay cabida para explotar la creatividad al máximo. Sin embargo, al no existir un estándar definido, esto también tiene riesgos ya que, obviamente, ni es un currículum habitual, y los reclutadores lo van a tratar como tal.
¿Te interesa un currículum audiovisual?
Realmente para la gran mayoría de personas que buscan empleo no es un modelo útil. Es cierto que puede marcar diferencia, también que nos distinguiría en una búsqueda de candidatos, pero, si nos ponemos en la piel de los reclutadores, realmente no parece un modelo excesivamente atractivo. Y, por otro lado, si pretendemos que el posicionamiento de nuestro currículum se base en redes sociales o redes sociales especializadas, el trabajo de posicionamiento es importante, y, ciertamente un trabajo especializado no al alcance de todos.
Otra cuestión diferente es que, en pleno crecimiento de herramientas tecnológicas, podamos utilizar como complemento cierto material audiovisual. Por ejemplo, una presentación en video (corta) puede ser una herramienta que sustituya a la presentación y fotografía tradicional del currículum. Sin embargo, también aquí, hay que tener claro el entorno al que se va a enviar este tipo de material, ya que la mayoría reclutadores no lo tendrá en consideración.
En definitiva, obviamente dentro de los currículums menos convencionales, los audiovisuales tienen un espacio importante. Lo van a seguir teniendo, eventualmente seguirán apareciendo casos de éxito, pero no se trata de un modelo interesante para la gran mayoría. Además de costoso, requiere una creatividad audiovisual que no todo el mundo dispone, así como herramientas de comunicación verbal, no verbal, y, cara a su posicionamiento, herramientas tecnológicas que no todo el mundo maneja. Por tanto, si, podemos observarlo como una rareza, e incluso como una opción, pero poco efectiva para la mayoría de persona
