¿Nervioso tu primer día de trabajo? Tranquilo, siempre suele pasar, solo recuerda que el primer día de trabajo es inolvidable y la experiencia enseña que, por lo general resulta ser más incómodo que gratificante. Es un día en el que deberás estar preparado para asimilar una gran cantidad de información, que además te será servida de un sólo golpe.
Piensa que ese día es en el cual encontrarás muchas expectativas y de muchas preguntas sin respuesta; sobre todo, de cómo serán tus compañeros y el ambiente de tu empleo en el que estarás integrándote en pocos días. También sentirás emoción por haber sido el elegido/a, pero al mismo tiempo sentirás un gran temor a lo desconocido.
Pero aquí mismo encontrará algunos consejos para el primer día de trabajo, solo relájese y léalos…
1. Ten confianza en ti mismo: Ya te han seleccionado, eso significa que tus características se adaptan al perfil que la empresa necesita. Repasa mentalmente tus cualidades y también tus defectos, esto te ayudará a saber de lo que eres capaz. Si tienes seguridad en ti mismo las personas de tu alrededor lo notarán y confiarán en tus posibilidades.
2. Infórmate sobre la empresa: Pregunta a tus contactos o visita la página web de la compañía y trata de conocer algo de su historia, así como su estructura y funcionamiento. Además, entérate de detalles prácticos cómo su ubicación o la forma de llegar que te ayudarán a ir sobre seguro en el primer día.
3. Sé puntual: Procura llegar algunos minutos antes de la hora de inicio, ya estarás lo suficientemente intranquilo como para que un retraso te convierta en un manojo de nervios. En los siguientes días comprobarás si el personal cumple estrictamente el horario o si existe flexibilidad en este sentido y podrás adaptarte a lo que hagan los demás.
4. Toma nota de los datos importantes: Lleva un cuaderno y un bolígrafo y apunta aquellos datos que puedas necesitar: claves, instrucciones, horarios, etc. No tengas inconveniente en preguntar las dudas que tengas, aunque con moderación, no necesitas saberlo todo en un día.
5. La primera impresión es fundamental: Son varios los factores que influyen en la primera impresión que los demás se forman de nosotros y todos ellos son importantes: el lenguaje corporal, la forma de expresarnos y la vestimenta que llevamos son determinantes. Nuestra mejor tarjeta de visita es la sonrisa, que nunca debe parecer forzada. Al expresarnos, debemos ser educados, prudentes, amables y seguros y nuestra vestimenta ha de ser discreta y esmerada; mejor ser más formal de lo que se requiere que llamar la atención por lo contrario.
6. Conoce tu entorno laboral: Trata de memorizar los nombres de las personas con las que a partir de ahora tratarás diariamente: tu jefe y tus compañeros directos. Ubica tu puesto de trabajo y los lugares que frecuentarás: el despacho de tu superior, el lugar donde se encuentran las impresoras y fotocopiadoras, la cafetería, los servicios, etc.
7. No hables de tu anterior trabajo. A los demás no les interesa qué hacías antes las 24 horas del día. Intenta mantener otros temas de conversación, empezar a conocer más a tus nuevos compañeros.
8. No agradar demasiado. Es normal que queramos agradar y caer bien a los demás, pero podemos caer en el error de ser muy pesados o exagerados en este punto. Lo mejor es ser uno mismo, decir lo que nos gusta y lo que no, siempre respetando a los demás , nos evitará más de un problema.
9. No importa tu edad: Para el caso de que consiga un nuevo empleo, deberá atravesar el temido “primer día de trabajo”. Estas sugerencias antes dadas, para manejarse en este día clave, decisivo para su futuro, le servirán mucho.