La jubilación es una etapa que, tarde o temprano, todos debemos enfrentar. Una de las principales inquietudes es saber cuánto se recibirá de pensión tras años de esfuerzo y trabajo. En este artículo, te ofreceremos una visión general de lo que puedes esperar si has cotizado 24 años.
La cantidad de pensión que corresponde con 24 años cotizados
El cálculo de la pensión no depende únicamente de los años cotizados, sino también de las bases de cotización durante esos años. Es decir, no solo importa cuánto tiempo has cotizado, sino cuánto has aportado al sistema de seguridad social durante ese tiempo. La cuantía final de la pensión se determinará en base a un periodo específico de años cotizados. Dependiendo del país y de las reformas de su sistema de seguridad social, este periodo puede variar, pudiendo considerar los últimos años cotizados o una media de toda la vida laboral.
Para quienes han cotizado 24 años, es probable que no se alcance el porcentaje máximo de la base reguladora para determinar la pensión. Por ejemplo, en algunos sistemas, se requieren más de 35 años cotizados para acceder al 100% de la base reguladora. Con 24 años, el porcentaje sería inferior.
Otro factor determinante es la edad a la que te jubiles. En muchos países, existe la jubilación anticipada, pero acceder a ella podría reducir el porcentaje de tu pensión. Por otro lado, si decides jubilarte más allá de la edad legal, podrías obtener un porcentaje adicional.
Casi todos los sistemas de seguridad social establecen cantidades mínimas y máximas de pensión, independientemente de las bases de cotización. Así, aunque hayas tenido una base de cotización elevada, es posible que tu pensión esté topada por un límite máximo. Algunos sistemas ofrecen complementos por maternidad, por haber cotizado más allá de la edad de jubilación o por otros conceptos. Es importante investigar estos complementos para tener una visión completa de lo que se puede recibir.
Muchos sistemas de pensiones ajustan anualmente las cuantías pensionales de acuerdo a la inflación u otros índices. Esto puede afectar la cantidad que percibes año tras año, garantizando, en teoría, que la pensión no pierda poder adquisitivo con el tiempo. Si durante tus 24 años de cotización trabajaste a tiempo parcial, esto podría influir en el cálculo de tu pensión. En muchos sistemas, los años trabajados a tiempo parcial se prorratean, lo que podría reducir la cuantía de la pensión.
Puede que dentro de esos 24 años, haya periodos en los que no cotizaste (por desempleo, cuidado de familiares, etc.). Dependiendo de la legislación, estos “años hueco” podrían tener un tratamiento especial en el cálculo de la pensión. Algunos sistemas permiten que los trabajadores hagan aportes voluntarios a su pensión, lo que podría aumentar la cuantía final. Si realizaste contribuciones adicionales, es vital tenerlo en cuenta.
Si tienes derecho a más de una pensión (por ejemplo, una pensión por viudedad y otra de jubilación), esto podría tener impacto en la cuantía total que percibes. En algunos sistemas, se aplican reducciones para evitar la percepción de múltiples pensiones máximas.
Las pensiones, al ser una renta, suelen estar sujetas a impuestos. Sin embargo, muchos países ofrecen deducciones, exenciones o tratamientos fiscales favorables para los pensionistas. Es fundamental conocer estos beneficios para saber cuánto recibirás neto. No todos los trabajadores están adscritos al mismo régimen de seguridad social. Puede que existan regímenes especiales para profesiones determinadas, y cada uno puede tener sus propias reglas de cálculo.