Debemos distinguir inicialmente entre mentir en el currículum y engordar el currículum. Aunque, en ocasiones pueden coincidir, realmente engordar el currículum es una cuestión diferente. Analizamos si es interesante o no hacerlo.
Engordar el currículum significa añadir dos tipos de contenido por encima del que resulta tras una primera redacción del documento:
- Aumentar los textos ya añadidos previamente, con más frases o comentarios
- Añadir datos, fechas o elementos informativos poco relevantes, pero no añadidos anteriormente
¿Por qué se engorda el curriculum?
Generalmente se tiende a engordar el currículum cuando se tiene la sensación de que el documento ha quedado vacío de contenido. Esto puede ser porque la experiencia profesional o los contenidos académicos no son muy amplios. En estos casos, se puede tener la tentación de añadir información poco relevante o redundar mucho en la información aportada.
No se debe confundir información puede ser relevante con información irrelevante. Por ejemplo, si hablamos de deporte, no será lo mismo indicar que se ha sido deportista profesional o semiprofesional con marcas deportivas contrastables, que indicar que se practica como ocio un deporte.
¿Merece la pena engordar un curriculum?
Definitivamente no. Hay que tener en cuenta que los recursos humanos selección han sufrido un vuelco en los últimos años. Hoy en día, la lectura de currículum (la primera lectura) apenas lleva unos segundos a los reclutadores. De hecho, en la mayoría de casos, se acude en dicha lectura de inmediato a elementos como la formación, la experiencia profesional o complementaria, y apartados relevantes como la presentación inicial o el cierre aspiracional puesto.
Esto significa que se le concede más importancia a un currículum breve, bien redactado, claro y con la información bien distribuida que a un currículum “biblia” en el que se despliega mucho texto que podría redundar en la mitad o menos.
Por tanto, definitivamente, engordar un currículum no es interesante. Otra cosa será, cuando el currículum se queda escaso por experiencia profesional, utilizar recursos que puedan suplir dicha falta de experiencia. En este sentido si es interesante, por ejemplo, las experiencias como prácticas, voluntariado, dirección de grupos, logros personales. Ya que la sección de experiencia será consultada sin ninguna duda, y, tener datos relevantes sobre el carácter de la persona, siempre es interesante para el reclutador. Pero, también aquí, conviene ser conciso y no extenderse.
Por ejemplo, si se ha realizado tareas de voluntariado, lo que interesa es citar la tarea, citar el tipo de actividad y en una frase, la experiencia que se considera haber recibido. Esto no tendría que ocupar más de dos líneas.
Curriculum conciso y claro
Llevamos años desde este blog analizando tipos de currículum, formas de currículum, ideas sobre los currículums. Si algo nos queda claro es que debemos huir, siempre, del barroquismo a la hora de la redacción.
En los tipos que corren más aún, lo importante es proporcionar información clara, concisa, bien redactada, y lo más legible posible. Esto, además de facilitar las tareas del reclutador, lo que hará es generar una imagen positiva hacia el candidato.