Un buen currículum no es sinónimo de infinidad de carreras y años de experiencia. Un buen currículum es aquel que anima al reclutador a saber más de uno mismo. Sin duda, conseguir pasar a la siguiente fase en un proceso de selección ya es todo un logro. La realización de un buen currículum vitae es algo complicada, sin embargo, gracias a la experiencia de otros, es posible conseguir un currículum vitae casi perfecto o, incluso, perfecto del todo.
Esto es , precisamente, lo que le ha ocurrido a Katie Simon. Tras innumerables cambios, Simon ha conseguido redactar el currículum perfecto, gracias al que ha recibido llamadas de empresas como Google y hasta doce startups. Incluso a conseguido entrevistas para una campaña política y para una fundación valorada en miles de millones de dólares. Según publican en The Independent, Katie no quería convertirse en esos jóvenes que vuelven a casa después de la universidad sin haber encontrado trabajo. Se apuntó a infinidad de actividades extracurriculares y amplió su red de contactos asistiendo a numerosas ferias de búsqueda de empleo.
No obstante, conseguir el cv perfecto no ha sido cuestión de un día. Su currículum es continuamente editado y actualizado por ella misma. Además, Simons ha revelado las nueve claves para tener un currículum ‘de 10′.
“Educación, experiencia, trabajos, algunos extra y guardar en excel. Esto es, técnicamente, un currículum vitae”, señala Simons.
Katie ha conseguido dar otro enfoque a este “documento de vida”. Después de varios años trabajando por su cuenta, ha conseguido dar con el currículum que abrirá las puertas de cualquier empresa.
Esquemático y bien estructurado
Hay que imaginar el currículum como un esquema que llevará al candidato a la entrevista de trabajo de sus sueños. ¿Qué preguntas quiere que le hagan? ¿Cómo quiere impresionarlos? ¿Qué le gustaría destacar y qué le gustaría evitar que le preguntasen? Es importante tener en cuenta que el reclutador no tiene ninguna información sobre el candidato y hay que resultar muy convincente.
Claridad, pocas palabras mejor
El candidato debe buscar claridad. El hecho de haber demasiadas palabras se asocia al desorden y confusión, llegando a causar rechazo. No importa lo impresionante que sea la experiencia y los estudios si no se expresa bien. Esto se soluciona eliminando todas las palabras que no aportan nada, como en un telegrama. Hay que eliminar sin miramientos: información, secciones, palabras, frases completas. La clave es preguntarse “¿esto sirve para mejorar la imagen que voy a dar a la empresa?”.
Ser conciso
Toda la información debe incluir en una sola página. No debe haber más de tres a cuatro secciones dentro de las principales y no más de tres líneas por cada una. Hay que intentar sintetizar la información.
Dar importancia a los resultados
Enfatizar los resultados es más importante que hacerlo con las habilidades. Por ejemplo, Simons lo refleja en esta frase. “Aumenté el seguimiento de Facebook de la compañía en un 40% y el alcance total de Facebook en un 60%” en lugar de poner “llevé las cuentas de Facebook y Twitter de la compañía”. Cuando sea posible, hay que incluir números exactos tales como porcentajes o crecimiento. Si desea enfatizar sus habilidades o métodos hay que buscar un impacto. “Incremento del tráfico del sitio web con estrategias de SEO dirigidas” en lugar de “estrategias de SEO para aumentar el tráfico del sitio”. La clave está en los resultados.
Proyectos más allá del trabajo
Añadir una sección de proyectos que no tengan relación con el trabajo. Si ha realizado algo que ha supuesto un gran impacto fuera del trabajo, tanto en clase de la universidad como en otro ámbito, como a través de un blog personal, hay que compartirlo. Para una clase de marketing en la universidad, Simons recomendé cambiar la marca a una organización sin fines de lucro que implementaron en su día y han seguido utilizando. Que el trabajo haya sido temporal o a tiempo completo no es importante si el resultado fue excelente.
¿Quieren saber más?
Hay que llevar a los reclutadores a otras fuentes de información sobre uno mismo. No se puede incluir toda la información sobre un folio de papel.
¡Si quieren aprender más de ti, hazlo fácil!
Se deben incluir enlaces a portafolios, un sitio web personal, página de Facebook, perfil de LinkedIn, identificador de Twitter, cuenta de Instagram y blog de fotos. Asegurarse de que esto sea apropiado para el sector.
Lo más antiguo sobra
Las experiencias de trabajo más antiguas no sirven de nada. Si se tiene más de tres lugares de trabajo anteriores, hay que deshacerse de uno o de dos. Aunque esos trabajos sean en los que mas tiempo ha estado el candidato, es más importante haber trabajado recientemente. Aunque no se tenga mucha experiencia profesional, se puede considerar excluir puntos menos impresionantes. No hay que olvidar que esto es un esquema, no un libro.
Algo raro no está de más
Incluir algo raro. Por ejemplo, un curso de trabajos manuales o de construcción. Se ajusta a una sección de educación y demuestra creatividad y disciplina. Esto hace que el candidato sea mejor y se diferencia del resto. Se puede incluir un canal de YouTube (si se tiene) o la participación en competiciones de cocina o surf. Incluso si no está relacionado con el trabajo o sector es importante incluir un extra extravagante que demuestre atributos positivos como emprendimiento, imaginación o una capacidad de trabajar bajo presión.
Adaptar el CV a cada empresa
Adaptarlo a cada reclutador. Sí, se necesita tiempo, pero no mucho tiempo. Sobre todo si se mantiene un documento con secciones opcionales y puntos para intercambiar. Se puede elaborar una lista con posibles puntos que añadir a las secciones y cambiarlos en función de la empresa y del perfil de candidato que buscan. De esa manera, se puede variar si se está solicitando un papel más técnico o no. Esto es especialmente útil si se está aplicando a trabajos en diferentes campos.
Si quieres ver el currículum de Katie Simons puedes hacerlo aquí.