Entrevista: El Miedo al Jefe

Miedo a la entrevista?

A nadie le gusta equivocarse, ser rechazado o hacer el ridículo delante de un futuro jefe, pero quedarse sin la posibilidad de obtener el empleo atemoriza a cualquiera. Si por éstas y otras razones ir al una Entrevista de Trabajo se convierte en una película de terror, no se bloquee. Enfrentarse al problema y conventir esos miedos en la excusa perfecta para ser más productivo y hacerse imprescindible.

Los miedos que uno puede llegar a sentir a la hora de enfrentarse a su futuro jefe, pueden presentarse de diferentes maneras. El miedo al ¿Qué dirán?, ¿Y si me equivoco?, ¿Y si no cumplo los requisitos? , desencadena en un miedo general visible a la hora de ser entrevistado, ese miedo es el que hay que canalizar para poder entablar una entrevista más llevadera.

El miedo bloquea, genera inseguridades, desconfianza, incomunicación, resta autonomía, asunción de responsabilidades y toma de decisiones. No es una herramienta de gestión, el peor miedo es el que te da vueltas.

Cuatro consejos para evitar el temor

1.Autoconocimiento. Trate de conocer y comprender el miedo. Cuál es su procedencia, qué lo provoca, por qué y cómo le está afectando.

2.Punto de partida. Pregúntese que puede hacer para dejar de padecerlo. Es el momento de tomar decisiones, de elaborar un plan acción.

3.Acción. El miedo sólo se supera desde la acción, la puesta en marcha y la ejecución de las decisiones tomadas.

4.Mantener la observación consciente. Una vez vencido el miedo trate de mantener un estado de observación consciente permanente. Le ayudará a descubrir esos miedos e incluso anticiparse a ellos.

Detrás de esos miedos se encuentran la subsistencia, la necesidad de control al que todo profesional aspira y la autoestima, elementos que mal gestionados alimentan el terror. Antes de llevarse las manos a la cabeza y entrar en pánico, es recomendable pensar qué es lo peor que podría pasar y que tan grande podría sería el problema si no se consiguiera el puesto en fin.

El miedo es el que tiene que explotar para luchar contra su terror,  infundado, con sus inseguridades, sus miedos y sus pequeños fracasos ocultos porque, todos somos humanos.

Ese sentimiento de inseguridad que te invade, desafortunadamente, lo transmites a tu reclutador quien, conciente o inconcientemente, te presiona mas para determinar si eres la persona adecuada para el puesto que ofrecen y más si el perfil del mismo requiere a persona que trabaje bajo presión.

Como debes saber cualquier sentimiento se encuentra en tu mente y en tu mente la debes de resolver. Practicar frente a un espejo y pensar en forma positiva, para cuando llegues con tu reclutador o futuro jefe, respira hondo y profundo varias veces para tranquilizarte y piensa que no tienes nada que perder y mucho que gana.

Con el correr de las entrevistas tienes que ir perdiendo el miedo y depositar confianza y seguridad ante un encuestador o futuro jefe, mientras mas rápido puedas quitar esos miedos de tu cabeza, menos entrevistas y más posibilidades de trabajo podrás obtener.

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