Enfrentarse al entrevistador

Recuerda esto: No hay una segunda buena oportunidad para causar una primera buena impresión.

Cuáles son los aspectos que generan un primera impresión: la indumentaria, la imagen que proyectas y tu actitud corporal. Te presentamos algunos tips para no fallar.

Respecto a la apariencia:

Hombres: Hoy día muchas empresas trabajan ropa casual, pero como saberlo de antemano. La recomendación es, en esos casos, para la primera entrevista ir con traje o conjunto de blazer y pantalón. Elige un gris topo y el azul (son llamados colores “de autoridad”) o bien clásicos y sobrios, es difícil que queden mal. Es importante el color de la camisa., esos trajes con una camisa blanca o neutra y una corbata al tono, es una combinación apropiada. El color de las medias debe hacer juego con la corbata. ¡Atención con el lustrado de tus zapatos! Es un detalle que se observa mucho.

Mujeres: Tailleur clásico o “faldas”, es preferible a pantalones, con colores con una agradable combinación. Tacos, no muy elevados. Recomendamos un peinado que no sea muy llamativo, al igual que el maquillaje, preferiblemente de día, simple y claro. El uso de bijouterie que sea simple y cuidado. Si vas perfumada, que no sea exagerado. Escotes pronunciados, faldas demasiado cortas o blusas demasiado ajustadas, no serán las ideales.

No fumes ni durante la espera, ni durante el transcurso de la entrevista. Si lo llegas a hacer, no entres al despacho del entrevistador con el cigarrillo en la mano ni mascando chicle.

En el primer contacto con el entrevistador, dar la mano en forma firme y segura, sonríe y mira a los ojos al entrevistador, sin agresividad. Saluda con la frase: “Julio Sánchez, encantado” o “Julio Sánchez, mucho gusto”. Siéntate solo cuando el entrevistador te lo proponga. Si llevas un efecto personal en la mano (abrigo, piloto, cartera, etc.), colócalo en un lugar que no invada el espacio del entrevistador. Siéntate bien derecho. Sin exagerar. Ni te sientes en el borde de la silla, ni te “desparrames en ella”. Si te ofrecen beber algo, pide café o agua. Jamás, una bebida alcohólica. Evita apoyar los codos en la mesa del entrevistador. No te muestres impaciente.

Es importante que conozcas tus fortalezas y debilidades. Siempre comienza, cuando te hacen esta pregunta, por las fortalezas. En cuanto a tus debilidades, trata de escoger algunas que sean la otra cara de tus fortalezas. Si hablamos de una persona proactiva y entusiasta, es muy posible que en algún momento se muestre impaciente cuando las demás personas no siguen su ritmo. Ten definido tu objetivo laboral: tipo de organización a la que aspiras ingresar, área, posición y nivel de remuneración. Es conveniente adaptarlo al marco de cada entrevista; recaba información previamente a la entrevista. Relee el aviso antes de la entrevista.

Aguarda a que el entrevistador se refiera al tema de la remuneración. Es conveniente en este caso te refieras a tu ingreso actual y los beneficios que percibes, y agregar aproximadamente un 20 a 30 %. Si no estás trabajando, puedes mencionar la última remuneración como dato indicativo. Siempre gradece la entrevista. Expresa tu agradecimiento por el tiempo que te dedicaron y por el trato que te dieron.

Sueldo:
El mercado del trabajo requiere de nuevas profesiones. Sin embargo, a la hora de cambiar de empleo es importante exigir algunas condiciones. Es fundamental hacer los
cálculos de nuestro sueldo bruto para conocer las deducciones que nos aplicarán, para finalmente saber cuánto nos corresponde de sueldo neto, es decir, cuánto dinero nos llevaremos a casa.

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